miércoles, 29 de agosto de 2007

Quiero que me digan por qué

Quiero que se quiten la máscara quienes tienen poder y gobiernan en el Perú

Quiero que me aclaren por qué se creó un FORSUR con 100 millones tan rápido, para los damnificados del terremoto y hace cuatro años que no cumple el Estado la recomendación de la Comisión de la Verdad de crear un Fondo para las Víctimas de la Violencia. ¿Se tendrán que pelear las migajas, nuevamente, los pobres? ¿Existen damnificados políticamente correctos y otros que pueden seguir en el olvido por décadas porque son socialmente irrelevantes y los reflectores no los enfocan? ¿No saben, acaso, que Ica tiene una gran población desplazada por la violencia que ha sufrido todos los desastres juntos: la pobreza, la exclusión, la guerra, los friajes y sequías y, ahora, el terremoto?

Quiero que me digan por qué le dan 20 millones a Baruch Ivcher por las pérdidas que tuvo su canal de televisión cuando lo capturó la mafia y sólo 45 millones para las decenas de miles de víctimas civiles, policías y militares del conflicto armado interno.

Quiero que el Presidente de la Corte Suprema y la Fiscal de la Nación me expliquen la insoportable lentitud de los procesos de los casos presentados por la Comisión de la Verdad y Reconciliación ante ellos en busca de justicia para las víctimas y sanción para los responsables; 28 de esos están aún en investigación preliminar.

Quiero que me expliquen, presidente, ministros de Defensa e Interior por qué las viudas de los policías, militares y funcionarios del Estado que fueron asesinados vilmente por Sendero Luminoso o el MRTA no han recibido desde hace más de diez años las casas que les corresponden por ley

Quiero que me diga, Señor Ministro de Defensa, por qué hasta hoy no hay un solo pedido de perdón expresado por el Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas por los crímenes contra los derechos humanos cometidos por militares que secuestraron, desaparecieron, ejecutaron, torturaron, violaron mujeres en bases militares durante el período de la violencia. ¿Es que nuestros militares, herederos de la tradición de Bolognesi, de Grau y de Quiñones, no tienen la altura de los militares argentinos y chilenos que han perdido perdón a las víctimas en sus países? Me niego a creerlo, los conozco. No todos son Nicolás Hermoza, Malca o Martín Rivas. La mayoría son dignos y respetables. No todos creen que em ese falso espíritu de cuerpo que defienden el Almirante Giampietri, Expreso y los demás pasquines fujimontesinistas, y los líderes apristas.
Quiero que me digan por qué no hay un solo Martín Balza que nos alumbre. ¿Por qué no nos merecemos escuchar similar y valiente pedido de perdón?:

“Estas palabras las he meditado largamente y sé que al pronunciarlas siempre dejaré a sectores disconformes. Asumo ese costo, convencido que la obligación de la hora y el cargo que tengo el honor de ostentar, me lo imponen. Sin embargo, de poco serviría un mínimo sinceramiento, si al empeñarnos en revisar el pasado no aprendiéramos para no repetirlo en el futuro. Sin buscar palabras innovadoras, sino apelando a los viejos reglamentos militares, ordeno, una vez más, al Ejército Argentino, en presencia de toda la sociedad argentina, que: Nadie está obligado a cumplir una orden inmoral o que se aparte de las leyes y reglamentos militares. Quien lo hiciera, incurre en una inconducta viciosa, digna de la sanción que su gravedad requiera. Sin eufemismos digo claramente: Delinque quien vulnera la Constitución Nacional. Delinque quien imparte órdenes inmorales. Delinque quien cumple órdenes inmorales. Delinque quien, para cumplir un fin que cree justo, emplea medios injustos, inmorales.

Si no logramos elaborar el duelo y cerrar las heridas, no tendremos futuro; no debemos negar más el horror vivido y así poder pensar en nuestra vida como sociedad hacia adelante, superando la pena y el sufrimiento.
En estas horas cruciales para nuestra sociedad, quiero decirles como Jefe del Ejército que, asegurando su continuidad histórica como institución de la Nación, asumo nuestra parte de la responsabilidad de los errores de esta lucha entre argentinos que hoy nos vuelve a conmover”

Quiero que me diga por qué tanto rencor y tanto odio contra la Comisión de la Verdad Señor Presidente ¿Por qué incumple sus recomendaciones si está obligado como Jefe de Estado a ejecutarlas plenamente?

Quiero que me diga qué respuesta le da a Salomón Lerner quien le manifestó a Alberto de Belaúnde ayer: “Hay gente que tiene conciencia de que lo que pasó estuvo mal, y esas personas – teniendo esa conciencia – se empecinan en negar lo que pasó, en afirmar – en una frase muy socorrida que le he escuchado a alguien muy importante en el país – que no hay que mirar por el retrovisor, que hay que mirar para adelante. Sin darse cuenta que lo que puede venir adelante es un precipicio que puede acabar con el país."

Quiero que me explique doña Lourdes, desde su despacho de rectora de la universidad del hombre que le mintió al país, por qué no dice nada en el cuarto, ni dijo nada en el tercero, ni el segundo aniversario de la entrega del Informe de la CVR?. ¿Por qué los partidos de siempre no se juegan por esta causa y más bien la atacan o se ponen de perfil?

Quiero que me digan por qué la insensibilidad y los oscuros intereses que campean en los medios de comunicación frente a la Comisión de la Verdad ¿Por nadie habla de la deuda de los medios de comunicación con la causa de la verdad, la justicia y la reparación? ¿Por qué las únicas portadas de la prensa escrita que leemos (como la de hoy de Expreso) son las de aquellos diarios ligados a la mafia de Montesinos y Fujimori, atacando a quienes reclaman lo que es justo? ¿Por qué el silencio de la televisión? Salvo unos cuantos periodistas, ¡gracias a Dios!

Quiero que me digan quién le va a explicar a Angélica Mendoza, a las madres, hermanas, hermanos y padres e hijos de los más de ocho mil desaparecidos por qué no se les habilita el programa de exhumaciones de los más de cuatro mil sitios de entierro detectados por la Comisión de la Verdad? ¿Quién le dice a Angélica que es probable que muera, después de hablar luchado tanto, sin poder enterrar los restos de su hijo?

Me duelen todas estas preguntas sin respuesta. Me lastiman tanto que ayer no fui a la conmemoración del cuarto aniversario de la entrega del Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación en la Alameda de la Memoria. No quería contagiar a esas personas imprescindibles y luchadoras ahí congregadas, mi profunda frustración.

Fue otra la realidad que soñé cuando en el Gobierno de Transición, creamos la Comisión de la Verdad un frío día de junio del 2001.

Nos atrevimos a soñar que éramos más los comprometidos con la construcción de una sociedad sin miedo a encarar la verdad, a luchar por la justicia y a reparar a las víctimas.

Creímos, optimistas impenitentes, que una vez oídos y vistos los desgarradores testimonios en las audiencias de la Comisión de la Verdad nuestra sociedad, y todos sus actores, harían suyos ese pesar y ese clamor por el reconocimiento, la verdad y la justicia de los asháninkas de la selva de Junín y de los hombres, mujeres de Ayacucho, Huacavelica, Apurímac, Huanuco, Lima, y de tantos otros escenarios del conflicto; que se iniciaría una profunda reflexión en todos los sectores de nuestro país sobre la terrible exclusión y discriminación en la que siguen viviendo nuestros hermanos y hermanas.

Quisimos que, con el material del Informe de la CVR, se elaboraría material pedagógico para que en todas las escuelas del país, las y los estudiantes, conocieran la verdad de lo que nos ocurrió cuando una fuerza criminal como Sendero Luminoso irrumpió en Chuschi en Cangallo en mayo de 1980 y nos lanzó a una guerra que cobró cerca de setenta mil vidas. Y, más que sólo conocer la verdad, que reflexionaran sobre por qué nos sucedió y qué debemos hacer para que algo así no se repita nunca en el Perú

Aunque hayan marchado los Caminantes por todo el Qapaq Ñan y seiscientas mil personas o más se movilizaron en el país atando los nudos en el Quipu de la Memoria; aunque hayamos conquistando una Ley y un Reglamento para las reparaciones; aunque tengamos un Consejo Nacional de Reparaciones y se hayan repartido en Ayacucho y Junín algunos miles de soles a las comunidades afectadas; seguimos, como dijo Gastón Garatea, "empezando desde hace cuatro años".

Somos pocos aún y no tenemos el poder necesario para que la verdad, la justicia y la reparación se puedan vivir plenamente en el Perú. Me dirán que eso no ocurre en ningún país. No es cierto. En Chile, Argentina, Uruguay, aún en Brasil, venciendo todas las resistencias, han avanzado mucho más que nosotros.

Quien sabe debí estar ayer en la Alameda de la Memoria y esta entrega no tendría tono de alegato. Quien sabe no debiera siquiera publicar esta página en el blog porque los políticos no se “franquean”, sólo dicen lo que les dicen sus asesores que digan, lo que es políticamente correcto. No entré a la política para ser así (no soy por ello mejor ni peor) ; no me importa decir lo que me sale de los forros. Asumo mis dudas, mi frustración, mi dolor y los comparto.

Sólo quiero que me digan si todo esto debe seguir así o si vamos a cambiarlo.


Perdonen las cuatro páginas. Hasta la próxima

domingo, 26 de agosto de 2007

No necesitamos un Zar, necesitamos reconstruir con democracia , eficiencia y transparencia

Como no podía ser de otra forma, Alan nombró un Zar para asumir la emergencia y la reconstrucción del sur. Se trata del empresario pollero Julio Favre quien se hará cargo de dirigir el Fondo de Reconstrucción del Sur (FORSUR). Este señor dará cuenta exclusivamente al Señor Presidente ya que estará adscrito a la Presidencia de La República. Peligrosa iniciativa ¿Quién se hará responsable políticamente de lo que el Zar haga o deje de hacer? Nadie

La entidad para la reconstrucción debe ser concebida, integrada y organizada de una manera radicalmente distinta, como lo plantea la Primera Asamblea Ciudadana de Ica, realizada el viernes 24 de setiembre. Por ello, debemos oponernos a este Frankenstein alanista, sacado de la manga, condenado al fracaso. No es responsable improvisar en una situación de tragedia y crear instituciones que no rendirán cuentas ni gozarán de legitimidad.

El terremoto cuarteó la máscara de García. Es el Alan de siempre. El Alan autoritario y omnipotente que reemplazó al Consejo de Ministros, al INDECI, a las autoridades regionales y municipales en el manejo de la emergencia del terremoto y, ahora, pretende hacerlo con la reconstrucción. Es el Alan que se indigna y acusa a quienes lo critican, olvidándose que cuando compitió para la Presidencia sabía que iba a vivir en una vitrina (ojalá el escrutunio fuera más exigente aún) Este es el Alan ineficaz e inficiente de los patrulleros chinos y las bombas lacrimógenas, el del desastre de su gobierno anterior. Este el es el Alan que no aprende.

Otra manera de enfrentar las consecuenciasdel terremoto: con democracia y transparencia, fortaleciendo la descentralización y las capacidades locales.

Mientras Alan García actúa así, a su manera, la Coordinadora Civil por la Emergencia y la Reconstrucción de Ica en la que participan las organizaciones cívicas del departamento, entre ellas, el Colegio de Ingenieros de Ica, el FREDEPJUP-ICA, la Universidad Nacional San Luis Gonzaga, el Comité de derechos Humanos de Ica (CODEH-ICA), la Mesa de Concertación de Lucha Contra la Pobreza y el Foro Ciudadano de Ica, proponen un plan completo para encarar la emergencia y la reconstrucción desde una opción democrática y técnica: “Que fortalezca el proceso de descentralización, que esté dirigido por instituciones y organizaciones de Ica y con la participación de la sociedad civil”.

Por su importancia, recojo en el blog el íntegro de este importante comunicado:

Solidarios y vigilantes, hasta la próxima

I ASAMBLEA CIUDADANA DE ICA

ACUERDOS:

Convocados por el Colegio de Ingenieros y la FREDEPJUP, los ciudadanos y ciudadanas y las organizaciones cívicas asistentes a la I Asamblea ciudadana de Ica reunidos en el local del Colegio de Ingenieros de Ica, acordamos:

Conformar la Coordinadora Civil por la Emergencia y la Reconstrucción de Ica con la participación de todas las organizaciones cívicas del departamento de Ica. La Coordinación de la misma inicialmente estará a cargo de las siguientes instituciones:

Colegio de Ingenieros de Ica
FREDEPJUP-ICA
Universidad Nacional San Luis Gonzaga de Ica
CODEH-ICA
Mesa de Concertación de Lucha Contra la Pobreza
Foro Ciudadano de Ica

Convocar a un Segunda Asamblea Ciudadana el día lunes 27 a las 4 p.m. en el local del Colegio de Ingenieros. La Coordinadora es un espacio abierto a la participación de todas las organizaciones sociales y cívicas y empresariales de Ica.

Se acuerda invitar a la II Asamblea al Presidente Regional, la Municipalidad Provincial, COFOPRI, con la finalidad de recibir información de su labor y coordinar acciones para un trabajo conjunto.

Promover y Fortalecer la organización de la Población para su participación en las tareas de emergencia y reconstrucción, para canalizar organizadamente las tareas de emergencia, incluyendo el empadronamiento y la seguridad ciudadana:

Promover o fortalecer la organización de Comités Unitarios de Emergencia y Reconstrucción en los Pueblos Jóvenes, Anexos y Caseríos, integrados por todas las organizaciones sectoriales y autoridades de cada lugar presididos por la Junta Directiva respectiva.
Promover la Organización de la Población afectada del Cercado de las ciudades de Ica, Pisco y Chincha. En el caso de Ica se propone la formación por conos, y del Centro.

Fortalecer o promover la organización de Comités de Emergencia y Reconstrucción en cada Distrito Presididos por los Alcaldes, los delegados de todas las organizaciones sociales y territoriales, iglesia, las autoridades e instituciones de cada distrito.

SOBRE EL PROCESO DE EMPADRONAMIENTO DE LAS FAMILIAS AFECTADAS:
Proponer y contribuir a la implementación de un Solo y Unico Proceso formal de Empadronamiento de la población afectada con las Fichas de INDECI. Todas las organizaciones asistentes ofrecemos nuestro servicio para tal labor.
Proponer que la segunda ficha ( de evaluación de los daños materiales y la vivienda) sea realizada con criterio y participación de personal técnico, para lo cual el colegia de ingenieros, la UNICA, y ONGs ofrecen su apoyo

Demandar que se otorgue una credencial a las familias empadronadas de tal forma que puedan tener una constancia de su condición

Demandar a INDECI realizar una amplia información a través de los medios de comunicación del proceso de empadronamiento que se está realizando.

Demandar el Funcionamiento Permanente de los Comités distritales, Provinciales y Regional de Defensa Civil de acuerdo a Ley:

Que consolide una información única de los daños del Terremoto
Realización de Reuniones diarias
Atención las 24 horas del día
Oficina y Teléfono Públicos con permanente atención
Información permanente.

SOBRE LA COORDINACIÒN DE LOS DIVERSOS NIVELES DE GOBIERNO
Demandar y exigir públicamente que el Gobierno Regional y Provincial de Ica coordinen las labores de emergencia.

Que el Gobierno Central, traspase al Gobierno Regional y las municipalidades provinciales de Ica las funciones de organización de las labores de emergencia, en particular la administración del Almacén de la Base Aérea de Pisco. Que luego las autoridades del Gobierno Central continúen su labor de apoyo en coordinación con el Gobierno Regionales y Gobiernos Provinciales y Distritales.

Que la distribución del apoyo a la emergencia del Almacén de Pisco se realice de manera proporcional al daño del desastre a cada una de las provincias afectadas priorizando a la Provincia de Pisco.

Que la distribución del apoyo a los distritos se realice solamente a través de las municipalidades distritales. Las municipalidades provinciales se encarguen de la distribución en el cercado de cada provincia, y el Gobierno Regional organiza la distribución a través de las Municipalidades provinciales y distritales, en ningún caso directamente..

Que la labor del PRONAA, los programas del Gobierno Central como “A Trabajar Urbano”, se canalicen en coordinación con el Gobierno Regional y las Municipalidades provinciales y distritales. Que los dispositivos legales que se promulguen respecto a la labor de los sectores, establezcan la obligatoriedad de dicha coordinación.

SOBRE LAS MEDIDAS PARA LA EMERGENCIA Y RECONSTRUCCIÒN

Plantear que la subvención para aliviar los efectos del desastre de la destrucción total de vivienda ( 6,000.00 nuevos soles) contemplado en del Decreto de Urgencia 023-2007 del 16 de Agosto, no sea impedimento para acceder a apoyo para la reconstrucción de las viviendas.
Gestionar ante SUNAT, Caja Municipal de Ica y otras, ASBANC, adopten medidas similares al Banco de la Nación para dar facilidades en el pago de impuestos o créditos de la población, comerciante y empresarios de la zona.

Plantear la Creación de UN PROGRAMA DE RECONSTRUCCIÒN DE VIVIENDAS Subsidiado por el Estado y la ayuda internacional, para la atención a los daños ocasionados por el terremoto, en los casos de destrucción total, de daños parciales, e incluya alternativas a los inquilinos.
Demandar a COFOPRI y las Municipalidades provinciales y locales, la TITULACION acelerada de los terrenos urbanos y Ruales para sanear la propiedad que permita la reconstrucción de las viviendas afectadas. De igual forma acelerar el saneamiento físico legal de los asentamientos humanos.

Que ser formule y apruebe un Nuevo Reglamento de Edificaciones para la Región Ica elaborado con participación del Colegio de Ingenieros y Arquitectos de Ica, que permita tener viviendas los mas seguras frente a terremotos e inundaciones.

Exigir al Gobierno Central, el GR, la Municipalidad Provinciales, Y Distritales, realizar una información detallada, escrita y pública de las donaciones recibidas, los gastos propios y entregas de apoyo de emergencia sobre todo material realizada. Pedir a la Defensoría del Pueblo, la Fiscalía y la Controlaría reforzar su labor de fiscalización de dicha labor.
Demandar la Implementación y Ejecución del Proyecto de Galerías Filtrantes de EMAPICA.

SOBRE LA ENTIDAD PARA LA RECONSTRUCCIÓN DE ICA

Plantear al Gobierno Regional, la conformación del Sistema y Centro de Planeamiento Regional para la Reconstrucción y el Desarrollo a través de la ordenanza respectiva, con la participación de los colegios profesionales departamentales, Universidades, Gobiernos Locales y entidades especializadas.

Creación de Una Instancia encargada del Proceso de Reconstrucción
i. Que Fortalezca el proceso de Descentralización
ii. Dirigido por instituciones y organizaciones de Ica
iii. Con participación de la Sociedad Civil

Demandar la elaboración de un Plan Integral de Reconstrucción y Desarrollo de Ica elaborado por el Gobierno Regional en consenso con los gobiernos locales, el empresariado, los colegios profesionales, las universidades y con participación del Gobierno Central.


Ica, 24 de Agosto del 2007

jueves, 23 de agosto de 2007

¿Reconstruir la exclusión de siempre?

¿Cuántos damnificados hay en Huancavelica en las provincias de Castrovirreyna y de Huaytará? ¿Cuánta ayuda y cómo se les está llevando? No son prioridad, no aparecen en las cifras que se difunden diariamente. Nos hablan de Pisco, de Chincha, Cañete e Ica en donde la magnitud del desastre y del sufrimiento es enorme, la negligencia del Estado, inmensa; a contrapelo de la solidaridad. Poco o nada sabemos de quienes habitan en la altura, en Yauyos y Huancavelica. Es duro decirlo, pero aún entre las víctimas de un terremoto, existen diferencias.

Las brechas entre peruanos, la pobreza, y la fragilidad de las vidas y de los medios de subsistencia de nuestros compatriotas se desnudan por completo en estos momentos. Con el derrumbe, lo que estaba oculto u olvidado, se hace visible. Es imposible esquivarlo.


La gravedad del daño es mayor en la en los distritos mas cercano a la costa, en este caso Ticrapo y Mollepampa. En Tantará, Castrovirreyna, el cincuenta por ciento de las casas ha colapsado, que lo mismo ha sucedido en Cotas, Villa de Arma, San Juan de Castrovirreyna y que un porcentaje importante de viviendas se han desplomado en Aurahuá, y Chupamarca. El Instituto de Defensa Legal, que trabaja en Huancavelica en el Plan Regional de Reparaciones y que está movilizando ayuda para quienes están sufriendo las secuelas del embate de este siniestro, nos dice que el cuarenta por ciento de las escuelas de Huaytará y Castrovirreyna se han desplomado. En una zona ganadera y agrícola, el cien por ciento de canales de regadío de Huaytará y del norte de Castrovirreyna está resquebrajado. En uno de los departamentos más pobres del país, el treinta y cinco por ciento de las postas médicas no podrá volver a ser utilizada por los daños que presentan.

Según la cuarta versión del Censo por la Paz ― que ha investigado con mayor precisión cada vez a las comunidades afectadas por el conflicto armado interno ―, Castrovirreyna sufrió un nivel de violencia alta y Huaytará, una de nivel medio. Lo recogido en los testimonios e historias regionales del Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, nos describe una realidad muy dura también. En esas provincias habitan hombres, mujeres, ancianos, niños y niñas que son pobres extremos, campesinos, quechua hablantes en su mayoría, víctimas aún no reparadas del conflicto armado interno; son aquellos y aquellas que no han salido en su mayoría de la exclusión de siempre. A Ica se desplazaron muchas víctimas de la violencia de Huancavelica.
Recordemos a Salomón Lerner Febres, quien dijo, hace casi cuatro años, un 28 de agosto, al entregar el Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación: “…vivimos, todavía, en un país en el que la exclusión es tan absoluta que resulta posible que desaparezcan decenas de miles de ciudadanos sin que nadie en la sociedad integrada, en la sociedad de los no excluidos, tome nota de ello.”

Son peruanas y peruanas que nunca han sentido que el Estado es suyo. ¿Empezará a serlo ahora? ¿Reparará su sufrimiento, y saldará la incalculable deuda o le dará la espalda una vez más en esta nueva desgracia?

Solidarios y vigilantes.

Hasta la próxima

martes, 21 de agosto de 2007

Solidaridad con las víctimas. Saber elegir a través de quien ayudar

Son muchas y variadísimas las expresiones de solidaridad con las víctimas Sería interminable listarlas. Sólo quiero subarayar la extraordinaria participación de las y los jóvenes. Desde "Un Techo para el Perú" que va a construir 36 casas esta semana y piensa construir 100 en este tiempo en la zona del desastre, pasando por los 350 jóvenes de las Comunidades de Vida Cristiana que se desplazaron inmediatamente a apoyar en lo inmediato (y cuyo testimonio está registrado en uno de los comentarios a mi anterior entrega) , por decenas de personas con las que he conversado en estos días que han estado allá para ayudar en la logística en el centro de acopio de donaciones con su experiencia administrativa y logística adquirida en la empresa privada u organizando brigadas de sicólogas(os) jóvenes que prestan ayuda en salud mental por el fuerte trauma y el estrés que causa en las víctimas un evento en el que pierden todo: vidas, afectos y vínculos, la protección de una casa, se ven lanzado a la más absoluta precariedad e inseguridad. Esta es una gran movilización, más que de ayuda material, de voluntades y tiene rostro de joven.

Nuestro PDS está haciendo lo suyo, cada quien en las instituciones en las que participa voluntariamente o labora y también como partido para Chincha y otras zonas de manera silenciosa. Nuestro presidente Gabriel Prado, estuvo el fin de semana, cerca del sufrimiento de nuestros propios militantes y evaluando con ellos y ellas qué es lo que debemos hacer y en dónde. Que la mano izquierda no se entere lo que hace la derecha. Con ese estilo hay que ser solidarios y es esa la forma en que debemos hacernos presentes con las víctimas, en su desgracia, sin cámaras ni micrófonos.

Que la solidaridad llegue realmente a la gente

Les retransmito el mail del Instituto e Defensa Legal que es miembro de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos. El Comité de Derechos Humanos de ICA (CODEHICA) fundó la Coordinadora en 1985 y está trabajando en toda la zona afectada, con la eficacia, eficiencia y conocimiento que sólo una institución como el CODEHICA puede realizar. Es el mejor canal de ayuda y de información para esa zona. Que la solidaridad llegue realmente a la gente. Con los agudos problemas de organización que persisten en la entrega de la ayuda y con las noticias sobre corrupción, hay que ser muy cuidadosos con las instituciones a través de las cuales enviamos agua, víveres y enseres.

En Ica por ejemplo, en el barrio de Parcona, la ayuda no ha llegado todavía. Seis días después, la desorganización campea y la desesperación cunde. "He hecho cola por horas, son kilómetros de cola y nunca llego a recibir nada. Se ha acabado, medicen cuando llego al fin" . (Testimonio de Maximiliana Uribe quien ha perdido su casa que se derrumbó completamente perdiéndolo todo. Los doce miembros de la familia están a la intemperie. Ni agua, ni frazadas, nada han recibido hasta hoy, martes 21 de agosto. Como ella, muchísimos). CODEHICA es garantía.

De otro lado, el Instituto de Defensa Legal también trabaja desde hace unos años en Huancavelica, apoyando el Plan Regional deReparaciones a las víctimas de la violencia política. Está canalizando ayuda a Huaytará y a Castrovirreyna, las más afectadas por el terremoto del 15de agostro. Por ello, les copio su Ideéle mail, con información valiosa para quienes, desde el extranjero y aquí en el país, quieran apoyar.

Hasta la próxima.


Ideéle Mail


Estimados amigos y amigas,

El terremoto de ayer aun no termina, ahora se está sufriendo lo peor. Los escombros siguen cubriendo cadáveres, y los ya recuperados están tirados en las plazas porque no hay ataúdes ni morgues.

Dentro de las distintas acciones que estamos tomando frente a esta realidad, desde el Instituto de Defensa Legal (IDL) nos sumamos a las instituciones que están organizando colectas con el fin de ayudar a los damnificados.

A lo largo de estos días estaremos canalizando donaciones dinerarias a fin de comprar los bienes que, de acuerdo a la información obtenida de nuestras contrapartes en los lugares afectados y como hemos podido constatar con Defensa Civil, se necesitan con carácter de "URGENCIA", entre otros: palas, picos, calaminas, carpas, comida y ropa.

Los bienes obtenidos con el dinero serán utilizados de la mejor manera a fin de maximizar sus beneficios. Con tal finalidad, serán puestos a disposición de nuestra oficina en Huancavelica y de la Comisión de Derechos Humanos de Ica (CODEHICA), quienes los distribuirán directamente a la población afectada.

Quienes quieran colaborar pueden depositar su dinero en la siguiente cuenta del Banco Continental: 0011-0169-01000-16370.


Grupo de ayuda a los damnificados
Instituto de Defensa Legal


viernes, 17 de agosto de 2007

Mientras la tierra sigue temblando

Ernestina vive en San Genaro, Chorrillos, asentamiento humano que, como varios en lima, no tiene ni agua ni luz desde las seis y cuarenta y un minutos de la tarde del 15 de agosto.

― Me quieren cobrar un sol cincuenta por dos baldecitos de agua, de esos de pintura. Son unos sinvergüenzas, como esos del SOYUZ que subieron el pasaje ahí mismito del terremoto. Si eso pasa acá, cómo no estarán en Chincha, en Ica, en Cañete, en Huancavelica señora Susana. La municipalidad de Chorrillos ni se acuerda de nosotros, debió mandar un camión cisterna. Siempre los pobres pagamos más ― me comentó hoy

Qué cierto es eso y qué terrible lo que nos expresa esta mujer, ayacuchana de origen, que ha vivido la guerra, el éxodo y las pérdidas, también el miedo y la pobreza milenaria de las comunidades aledañas a Soccos.

Los desastres naturales no afectan por igual a todos. Así como unos son más iguales que otros; del mismo modo, si bien un terremoto impacta a todos, unos pueden recuperarse rápido, otros no. A estos últimos, los que realizan esfuerzos inmensos por salir de la pobreza, por ejemplo en un departamento como Ica en donde existe pleno empleo hoy, este trágico evento los lanza a esa pobreza de la que estaban saliendo; nuevamente al último lugar de la fila, a “esta sala de espera sin esperanza” como canta Joaquín Sabina.

Nuestro mejor rostro

Pero si hay esperanza. La extraordinaria red de solidaridad que se ha organizado desde todos los sectores y rincones del país en estos tres días es un hecho muy alentador, nos reconcilia con nosotros mismos, nos señala que no estamos solos cuando nos necesitamos. Eso es indispensable para la cohesión de una sociedad; podemos levantar un poco la baja autoestima que nos caracteriza. ¿Escucharon la noticia que desde las comunidades campesinas ayacuchanas habían enviado inmediatamente papas a Ica? Es maravilloso ver nuestra mejor parte en estos momentos límite de tanto sufrimiento. No ha sido frecuentemente así pero qué bueno es experimentar la solidaridad en la que no nos diferenciamos unos de otros, en la que sólo seguimos el mismo impulso de eso que nos hace más humanos: la compasión.

La insoportable levedad del Estado

Lo malo, sin embargo, es que nuestro Estado es insoportablemente leve, como dijo el sociólogo ecuatoriano Agustín Cueva parafraseando a Kundera; tan leve y lejano, tan ineficaz e ineficiente, que pesa demasiado sobre nuestros hombros. El INDECI, ente rector para la prevención y atención de desastres, es un desastre. Lo primero era estar preparado para distribuir de manera inmediata agua, carpas y frazadas (no las tenía ni en número ni en los lugares adecuados para intervenir inmediatamente) e, inmediatamente después, coordinar con los sectores del Ejecutivo y con los alcaldes que son los responsables de defensa civil en cada localidad. No ha sucedido así, ha salido el Presidente de la República a reemplazar absurdamente al jefe del INDECI. Lo mismo nos sucedió cuando, en junio del 2001, nos azotó el terremoto en Arequipa, Moquegua, Tacna y partes del sur de Ayacucho y tuvimos, en ese entonces como ministra del Gobierno de Transición, que organizar un comando especial, ante la total inoperancia de INDECI.

Dios no tiene nada que ver

“Gracias a Dios por habernos mandado esto, para que los médicos vuelvan a su trabajo”. No había pasado ni media hora del terremoto y esas fueron las palabras del Ministro de Salud. Pensé que seguía aturdida por el terrible remezón ya que no era posible que alguien dijera eso de”esto” que nos estaba pasando. Lo confirmé. “Jamás, señor ministro de salud, fue la salud más mortal” como dice Vallejo (no Vallejos).

Pero Dios no se instaló sólo en el nivel ministerial, subió al presidencial y escuché, también atónita, decir a Alan ― Esto ha sido una prueba más que se nos envía desde el más allá, desde Dios ―.

Dejen en paz a Dios; no lo utilicen ni alienten ese terrible pensamiento mágico de qué “algo habremos hecho para que Dios nos castigue o nos ponga a prueba”. El Dios en el que creo no es un rompehuelgas ni castiga. Es el Dios de la vida, cuya presencia aletea en a cada acto solidario que hacemos en estos días. Es el que acoge al que sufre y libera al pobre del yugo del opresor.

No reconstruir la injusticia

Esperemos que nuestros alcaldes y alcaldesas, que los tres presidentes regionales comprometidos (aunque el fujimorista Salas no debería actuar un día más como presidente regional de Huancavelica, usurpa el cargo, está impedido legalmente de ejercerlo y el Jurado Nacional de Elecciones ¡bien gracias!) realicen cabalmente su labor de atención humanitaria de manera inmediata y, luego, que no reconstruyan la pobreza y la injusticia. Ese fue el lema de muchos de nosotros en el terremoto del 70. No lo logramos. ¿Lo lograremos esta vez? Que la imagen que nos ha mostrado esta tragedia, que la desnudez de la precariedad con la que viven tantos compatriotas nuestros no se oculte una vez más en la desidia, la corrupción e insensibilidad de las autoridades, pasada la emergencia.

Solidarios y vigilantes.

Hasta la próxima

miércoles, 15 de agosto de 2007

Subirse a un bus, muertos de miedo



I. Los ninguneados

Nos sucede lo mismo que cuando vivíamos en el país los tiempos del terror: sumamos muertos en accidentes de tránsito, la principal causa de muerte en el Perú. Sus nombres suelen ser mayoritariamente los de aquellos y aquellas a los que Arguedas llamaba los ninguneados, por eso no salen en los medios; salvo es cierto, en el primer reporte que lanza el periodista desde el lugar de los hechos, entrevistando a la viuda prematura o algún familiar de quien se encuentra aún tendido en la pista; porque levantar los cadáveres; esa, esa es una triste historia de la que hablaremos otro día.

Son mayoritariamente pobres como lo demuestran los datos duros y fríos indicando que en nuestro querido Perú la inequidad reina en todo, también en el transporte terrestre. Los más pobres son los que más gastan su ingreso familiar para ir de un lugar a otro. Para hablar de Lima por ejemplo, sólo en Lima – Norte, el gasto es del 14% del presupuesto mensual, en Lima – Sur, el gasto el 11%. El nivel E gasta más en transporte (19%) que el nivel D (14%) y que el nivel C (13%). ¡Qué paradoja! Los que menos tienen gastan más, como con el agua y tantas otros bienes indispensables para vivir con dignidad.

Las cifras esconden a las personas, sus vidas y sus historias personales y colectivas; y tienden también, como la anestesia, a adormecernos. En el Perú, hasta el año pasado, el índice de mortalidad por causa de los accidentes de transito era de aproximadamente 25 personas por cada 10,000 vehículos. En estados Unidos es de 1, y en Chile, Argentina o Brasil es de 5 a 8.


II. ¡Qué poco vale la vida en el Perú!

¿Cuántas veces hemos escuchado esta frase y cuántas más vamos a escucharla antes que las cosas empiecen a cambiar? Es una pregunta pertinente para las autoridades y empresarios y para cada uno de nosotros y nosotras, justamente ahora que el tema desapareció de los medios, hasta la próxima racha.

Hace unos días, el presidente y la ministra de transportes le soplaron la pluma de las decenas de muertos de los últimos días a los gobiernos regionales a los que trasladan competencias y responsabilidades pero no les permiten destinar recursos de gasto corriente para poder contratar inspectores.

Los transportistas le echan la culpa a todo el mundo de sus problemas y no nos dicen la verdad: que en promedio existen ocho vehículos por empresa en el país y que no hay intención de asociarse para mejorar la calidad y dejar atrás la informalidad que alienta la competencia desleal.

Las municipalidades y gobiernos regionales no nos rinden cuentan de las inversiones en terminales terrestres que están dispersas por las ciudades; dejadas al buen saber y entender de cada alcalde, sin autoridad alguna que intervenga para poner un poco de orden.

Son demasiados actores los que comparten el negocio dando lugar al fenómeno del “comísionismo”. Pero hay actores que brillan por su ausencia, la Policía de Carreteras, por ejemplo, que nunca está donde debe ni en el momento en el que se la necesita por falta de interés de las autoridades del Ministerio del Interior a las que no le importan los continuos robos y violaciones sexuales que se producen en las carreteras, ni lanzan un serio y responsable plan de acción contra la corrupción que ha penetrado tan profundamente la institución policial.

Finalmente, la exoneración del pago del IGV a los transportistas no ha fomentado inversiones de mayor calidad; todo lo contrario, ha alentado la informalidad.

¿Cuántos muertos más tendremos que contar para que se corrijan estas cosas? Los problemas que aquí he listado exigen una acción más decidida, en mayor número de frentes y coordinada. Podemos hacerlo si gobernamos bien. Gustavo Guerra García, ex vice ministro de transportes y quien preside la Comisión Política del PDS, el que me ha dado los datos que aquí he reseñado, ha planteado, junto a un equipo de técnicos que reducir drásticamente el número de muertes en accidentes fatales en las carreteras es posible.

III. Mucho más que Tolerancia Cero

Cuando postulamos a la Presidencia en el 2006, quienes formábamos parte de Concertación Descentralista asumimos compromisos muy concretos para que esta tragedia se resuelva. Nos comprometimos a construir buenas carreteras (completar los corredores amazónicos, el eje vial 1 en el Norte, en la sierra Sur completar conexiones entre Huancayo y Abancay y el corredor Tarapoto-Tingo María, a ejecutar la mitad del proyecto carretero Pacasmayo- Soritor, Juanjuí-Salaverry y Chimbote-Tocache, entre otros grandes proyectos.

Compromisos son compromisos y era y es posible rehabilitar 20,000 kilómetros de caminos departamentales y afirmar 7,000 de caminos rurales. Todo ello ayudará a que se animen los transportistas a asociarse y a poner mejores buses en las rutas. Además, cuánto podríamos impulsar el mercado interno y las exportaciones rescatando de la postración a muchos peruanos y peruanas

Pero sabemos que ello no nos soluciona el problema de las muertes. Cuando las causas son el mal estado de los buses en general, el consumo de alcohol, el exceso de velocidad, la ausencia absoluta de control del número de pasajeros y la gran inseguridad en las carreteras, tenemos que decir. ¡BASTA!

IV. No hay muertos ajenos

Nos toca comprometernos y no ser cómplices de esta situación cada vez que subimos a un bus con un amargo sabor en la boca y un miedo que nos hiela el alma, sin saber si es bus camión o si los choferes han dormido y se turnan y si se han metido o no, entre pecho y espalda, algunas chelas o esencias aún más fuertes. Nos hace falta alzar la voz cuando corren para ganar pasajeros en la ruta y cuando llenan el bus hasta el tope, con niños y mujeres y embarazadas en los pasillos. Nos corresponde decir o hacer algo cuando escuchamos la radio, leemos los diarios o vemos las horrorosas imágenes en la televisión. Que no nos vuelva a suceder lo que en las décadas de los ochenta y noventa, cuando parecía que los muertos eran de otros, no de nosotros. Ningún muerto es ajeno, alzó la voz Gustavo Gutiérrez en esos tiempos para sacudirnos de la indiferencia.

O nos persignamos y nos callamos y respiramos aliviados por estar vivos al llegar a nuestro destino, o nos ponemos las pilas y exigimos a todos que cumplan con lo que les toca.

¿Por qué creen que en Chile o Argentina hay menos accidentes fatales en las carreteras que en el Perú? ¿Porque son más ricos y mejores seres humanos que nosotros? De ninguna manera. Porque tienen ciudadanos y ciudadanas que exigen sus derechos, valoran más sus vidas y obligan a los empresarios y a las autoridades a ser responsables.

Son más los que mueren diariamente por accidentes que todos los que murieron por la violencia política.

Esto tiene que parar.


sábado, 11 de agosto de 2007

TE CONOZCO DE ALGUNA PARTE

Con mucha frecuencia me sucede en la calle, en Lima y también en algunas ciudades del país. Una mujer, o un señor, a veces jóvenes, se me quedan mirando un rato, se acercan y me dicen:

― Dime, ¿dónde nos vimos?, te conozco de alguna parte ―

― No sé ― respondo. ― Me llamo Susana ¿y tú? ―

Me dicen su nombre, nos estrechamos la mano. Si es en un taxi, hablamos del negocio
― Estaba en “sistemas”, en empresas pero saqué mis cálculos, lo que me pagaban no era suficiente Estoy por terminar de pagar el carro, lo alquilo y me dedico a lo mío. Es el futuro ―.
Otros se quejan. Generalmente la habían visto bien hasta que llegó Alan y se les evaporó el ahorro o el chino y los botaron; alquilan el carro. Sacan 20 limpios, con mucha suerte 30 un día de fin de semana. Terminamos hablando de los hijos, de la vida, de la política y de pronto…

― ¿No es usted la que fue ministra de Toledo?― me dicen algunos.

― No, no creo que Toledo me hubiese pedido ser ministra de su gobierno después que dije que debía hacerse la prueba del ADN por Zaraí. Tampoco habría aceptado, no es mi tipo ― les digo.
― Fui ministra de Paniagua, a mucha honra ―. Otros piensan que soy de la “tele”; un número nada despreciable recuerda mi paso por la Policía, cuando fui su defensora. La mayoría, sin embargo, se acuerda que fui candidata a la presidencia.

Y entonces, sucede algo doloroso. Cambia el tono coloquial y directo con el que estábamos hablando de sus cosas y de las mías. Se ponen serios, pasan del tu al usted y algunas, hasta me piden disculpas por haberme…

― tratado con tanta confianza. No me di cuenta, qué habrá pensado usted que soy una confianzuda. Pero es que usted no parece…―.

― No parezco política, ¿no es cierto? ―

― Ojalá así fueran todos, no se desanime, siga―.

De eso se trata. Del trato que nos damos y de las imágenes que tenemos de quienes han ejercido o ejercen algún tipo de responsabilidad pública. Los guardaespaldas, las cuatro por cuatro, las lunas polarizadas, la distancia. Quienes están en el poder o lo han ejercido alguna vez no conversan en un taxi como cualquier mortal. Para empezar, muy pocos toman taxi o micro, tienen carro con chofer. No caminan libremente y solos por la calle ni suben a un bus interprovincial con su frazada para cruzar Ticlio y no pelarse de frío.

Quienes fueron ministros o los son, no hacen cola en la RENIEC o en Luz del Sur por un recibo vencido y no entregan su documento de identidad en el puesto de Requisitorias en el Aeropuerto, se molestan y vociferan cuando un inadvertido policía cumple con su deber y no reconoce su alta investidura, como me contó un sub oficial que le había pasado con un congresista que hoy es ministro. ― me gritó, me dijo no sabe usted con quién está hablando ¡cómo se le ocurre pedirme el DNI!, ¿acaso soy un delincuente?―. Me reí y nos reímos

― A esos y a esas siempre pídanle el DNI, no saben qué sorpresas se van a encontrar ―.

Me apena lo que les cuento y quisiera que eso cambie. Por eso hago política, para que nos tratemos como iguales y para que quienes, designados o elegidos, ejerzan autoridad y manejen poder no tengan privilegios.

¿Les parece imposible? A mi no.